El conflicto por la construcción de la planta de nitrógeno en Zuidbroek es un espectáculo vergonzoso. Durante la mayor crisis energética de la historia, el principal contratista estadounidense Air Products y su socio Ballast Nedam lograron que su argumento se les fuera de las manos. La mala cooperación conduce a una ruptura. Como resultado, la apertura de la planta de nitrógeno se ha retrasado indefinidamente.