Tras los cierres forzosos de 2020, los juegos vuelven a funcionar y en el mostrador de Hacienda registran nuevos ingresos de 10.300 millones. Nos acercamos así a niveles prepandemia: según datos de la industria del juego, elaborados por la agencia especializada Agipronews, en 2022 el Estado recaudará de hecho en torno a 10.300 millones de euros, una cifra inferior (-9%) a la de 2019 -cuando Hacienda recaudó 11.300 millones- pero claramente superior a 2021 (+22%), año en el que la ola larga del Covid todavía había hecho sentir sus efectos en los salones recreativos y las agencias de apuestas, cerrado durante unos 6 meses.
Juegas más, el gasto también crece
El gasto, es decir, la recaudación neta de ganancias, también tiende a estabilizarse: en 2022 los jugadores gastaron más de 19.600 millones de euros, un +2 % frente a los 19.300 millones de 2019 y un +28 % frente a los 15.400 millones del año pasado.
Ejecutar el juego en línea
En comparación con 2019, sin embargo, la distribución del gasto ha cambiado: la red de puntos de venta “retail” registró una caída global del 8,7% (de 17.400 a 15.900 millones), debido principalmente a la caída de las máquinas tragamonedas y las videoloterías, que en el espacio de tres años perdió el 17% (de 10.200 a 8.500 millones). La recuperación del sector viene impulsada principalmente por el gasto online: el gasto se duplica en tres años de 1.800 a 3.700 millones, impulsado por el póquer y los casinos -que pasan de 969 millones en 2019 a 3.700 millones- y por las apuestas, que registran un aumento del 89 % (1.400 millones frente a 783 millones).
Recopilación
El mercado supera los valores de hace tres años (131.000 millones frente a 110.000 millones, +19,5 %) pero con diferente peso del online sobre el retail: los datos confirman el giro de algunos players hacia la web, aunque la brecha se reduce a medida que las tiendas reabren por completo. El comercio minorista vuelve a subir a 61.300 millones, mientras que las colecciones de juegos en línea registraron 70.500 millones, el doble de los 36.400 millones de 2019.