El gobierno chino anunció el lunes por la noche que a partir del 8 de enero, los viajeros entrantes ya no tendrán que estar en cuarentena y que se emitirán más visas. Por lo tanto, la política china de cero covid ha sido completamente desmantelada.
Beijing anunció el levantamiento de las restricciones de viajes internacionales como parte de un cambio de política más amplio, pasando de tratar el Covid-19 como una enfermedad de categoría A (como el cólera o la peste bubónica) a una enfermedad de categoría B (como el VIH o la hepatitis viral). Esto significa que ya no es necesario combatir el virus con cuarentenas y bloqueos.
Cambio brusco de rumbo
La reapertura de las fronteras es la culminación de un rápido desmantelamiento de la política de cero covid de China, que se inició a principios de diciembre después de la caída del número de infecciones y las protestas contra los numerosos bloqueos. El cambio de rumbo abrupto y desprevenido ha desencadenado en poco tiempo una enorme ola de omikron en China, inundando muchos hospitales y crematorios.
Los expertos extranjeros predicen que podría haber de 1 a 1,6 millones de muertes por covid en China en los próximos meses y abogan por frenar la propagación del virus para que el sistema de salud chino no se vea completamente abrumado. También instan a campañas de vacunación rápidas, ya que las personas mayores frágiles en China en particular ahora no están suficientemente vacunadas.
El gobierno chino apenas proporciona información sobre el impacto de la ola de omikron, pero según estimaciones gubernamentales filtradas, casi 37 millones de personas se infectan por día. Como parte del cambio de política, Beijing también anunció que ya no publicaría cifras oficiales sobre infecciones, hospitalizaciones y muertes por covid diariamente, sino solo mensualmente.
Interrupción económica
China cerró sus fronteras a principios de 2020 después de controlar el brote de covid en Wuhan con bloqueos e implementar una política estricta de cero covid. Esa estrategia de contención logró durante mucho tiempo mantener bajo el número de muertes por covid, pero se descarriló por la variante omikron mucho más contagiosa. Los bloqueos interminables y las restricciones de viaje llevaron a una perturbación económica y social masiva.
Como parte de su política de cero covid, China ha estado poniendo enormes obstáculos para los viajeros del extranjero durante casi tres años. Se revocaron las visas, se diezmó la cantidad de vuelos internacionales y los viajeros tuvieron que pasar hasta tres semanas en cuarentena en hoteles al llegar, a menudo en condiciones incómodas. El número de pasajeros aéreos hacia y desde China cayó al 1 por ciento del nivel anterior al covid en 2021.
En la actualidad, los viajeros entrantes deben permanecer en cuarentena durante ocho días después de llegar a China, de los cuales tres días pueden pasarse en casa en muchos casos. A partir del 8 de enero, viajar a China solo requerirá una prueba PCR con menos de 48 horas de antigüedad. El gobierno chino también dijo que las visas serían más fáciles de emitir, aunque no hizo comentarios sobre las visas para turistas. Se levantarán las restricciones a los chinos que les impedían viajar al extranjero.