Todavía es incierto si los países que participan en la cumbre climática en Sharm-el-Sheikh, Egipto, podrán ponerse de acuerdo sobre una declaración final. El comisario europeo, Frans Timmermans, dijo el sábado por la mañana que prefería “ningún resultado” a “un mal resultado”. “Todos los ministros de la UE están listos para retirarse” si persisten los desacuerdos, dijo Timmermans según agencias de noticias internacionales.
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El comisario europeo habló en nombre de la UE con, entre otros, Estados Unidos y China. Timmermans caracteriza la actitud estadounidense como “constructiva”, pero afirma haber escuchado muy poco “del otro lado”, presumiblemente refiriéndose al séquito chino. Entre otras cosas, Timmermans quiere que los países se comprometan con el objetivo climático de reducir el calentamiento global a 1,5 grados. “No podemos aceptar que se pierdan 1,5 grados aquí y hoy”.
Se suponía que la cumbre duraría hasta el viernes. El sábado por la mañana, el ministro holandés Rob Jetten (Clima y Energía, D66) ya vaticinó el fracaso de un acuerdo. “Parece que estamos retrocediendo en el acuerdo climático de Glasgow y eso sería inaceptable”, dijo Jetten. En la ciudad escocesa, los países acordaron hace un año, entre otras cosas, dejar de dar subsidios a los combustibles fósiles y eliminar paulatinamente el uso del carbón.
Al mismo tiempo, también hubo críticas a los “pasajes vagos” del acuerdo internacional. Se trataba principalmente de la solidaridad climática económica entre países prósperos y en desarrollo. Los países más ricos no cumplieron su promesa de recaudar $100 mil millones anuales para ayudar a los países en desarrollo afectados por el cambio climático.
Dinero
El dinero también es un tema candente durante la actual cumbre climática en Egipto. Es cierto que el comisario europeo Timmermans prometió anteriormente que los estados miembros de la UE estarían preparados para establecer un fondo de compensación para los países más pobres afectados por el calentamiento global, pero impuso una serie de condiciones a esto. Por ejemplo, el Comisario Europeo quiere que el dinero vaya solo a los países más pobres, y también quiere que la declaración final se centre en la eliminación gradual de los combustibles fósiles como el petróleo y el gas.
La UE también pide a Estados Unidos, inicialmente opuesto a tal fondo de solidaridad, que contribuya. Además, según Timmermans, países como China, Qatar y Arabia Saudí también deben aportar parte de la financiación. Esos países todavía están clasificados oficialmente como países en desarrollo debido a la situación económica del pasado. China ya ha indicado que está a favor del fondo, pero que no quiere contribuir al mismo, porque teme perder el sello de país en vías de desarrollo.