Los tipos de referencia en la Eurozona «siguen por debajo del nivel consistente con la consecución de nuestro objetivo de inflación a medio plazo. Por lo tanto, la necesidad de continuar con la acción restrictiva es evidente, incluso si las razones para implementar un enfoque menos agresivo están ganando terreno. Así Ignazio Visco, gobernador del Banco de Italia y miembro del Consejo de Gobierno del BCE, quien en una lectio magistalis a la Cámara da cuenta de las diversas críticas vertidas recientemente sobre la sincronización de la política monetaria de Frankfurt.
Visco no está de acuerdo con quienes señalan la presencia de niveles de equilibrio de tipos hacia los que debería apuntar el BCE. Según Visco, en cambio, a día de hoy no podemos hacer otra cosa que «avanzar sobre la base de la evidencia, de las expectativas, de los costes laborales, de los márgenes de beneficio y de los precios de las materias primas, que poco a poco irán estando disponibles, de las tendencias políticas y económicas que se definirán en el mercado internacional, de proyecciones y análisis de escenarios a ser considerados siempre con prudencia pero imprescindibles para las decisiones. Decisiones que habrá que tomar en los próximos meses con la máxima atención, pero sin formular a priori caminos más o menos realistas por los que avanzar».
“La redistribución de los costes energéticos no debe ser a costa de la reducción de la deuda pública”. Visco señala una línea de actuación al Gobierno: «A nivel doméstico, el aumento de los costes energéticos se puede redistribuir entre los perceptores de renta, con intervenciones puntuales y temporales para apoyar a las familias y empresas más afectadas, pero posiblemente no entre generaciones a través de continuos desfases en la consolidación de la deuda pública». El Gobernador agrega que “es un ‘impuesto’ a nuestra economía que no se puede devolver al remitente y que no se puede eliminar con vanas persecuciones entre precios y salarios. Además de seguir apuntando a reducir sus excesos mediante respuestas mesuradas a nivel europeo, debe contenerse en el tiempo con la diversificación de las fuentes de suministro y las inversiones en energías renovables. En cualquier caso, la responsabilidad de los interlocutores sociales sigue siendo crucial».
El Gobernador del Banco de Italia añade: “Ciertamente no es apropiado contar con el impuesto inflacionario para contener el peso de la deuda pública sobre la economía: solo se puede proceder con continuidad con reformas e inversiones para que se aproveche el potencial de crecimiento”. de los recursos disponibles hoy para el Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia, al mismo tiempo que muestra prudencia y responsabilidad en el frente de las finanzas públicas”.