El ministro de Hacienda, Jeremy Hunt, no deja nada de su jefa, Liz Truss


El secretario del Tesoro, Jeremy Hunt, el lunes temprano en la oficina de la primera ministra Liz Truss en el número 10 de Downing Street.Imagen Reuters

Después de que Truss lo designara el viernes como sucesor del despedido Kwasi Kwarteng, Hunt, un político experimentado, mostró rápidamente que no está de acuerdo con el paquete de recortes de impuestos que beneficia principalmente a los británicos más ricos. Esta política radical y especulativa ha causado gran consternación en los mercados financieros en las últimas semanas, sobre todo porque Truss y Kwarteng no habían dicho de dónde saldría el dinero. Kwarteng albergaba dudas en ese momento, pero Truss perseveró.

Hunt ahora está cambiando radicalmente de rumbo. En el transcurso de la tarde del lunes, el ministro presentará un proyecto de presupuesto en la Cámara de los Comunes, pero ya por la mañana ha sacado a relucir los puntos principales para calmar los mercados monetarios. Anunció que el recorte del impuesto sobre la renta del 1 por ciento ha sido pospuesto indefinidamente. Truss se había visto obligado previamente a mantener el aumento de la tasa del impuesto corporativo al 25 por ciento. Tampoco se producirá la abolición de la tasa impositiva más alta.

Una sorpresa fue el anuncio de Hunt de que después de abril no habrá más compensación por el aumento de las facturas de energía. Después de estos ajustes, que arrojan el equivalente a 35.000 millones de libras, no queda casi nada del minipresupuesto ofensivo. Se necesitan muchos más miles de millones para lograr el equilibrio correcto y Hunt propondrá más recortes presupuestarios. Tras su anuncio, como se esperaba, la libra subió y los rendimientos del mercado de bonos cayeron. Durante el fin de semana, el gobernador del Banco de Inglaterra ya había dado la bienvenida a la llegada de Hunt.

el futuro de truss

La intervención principal naturalmente lleva a la pregunta de por qué Truss todavía está allí. Después de todo, prácticamente todas las promesas que hizo a la dirección del partido el verano pasado durante las elecciones ahora se han esfumado. No ha sido vista desde una dramática conferencia de prensa el viernes. El líder de la oposición, Keir Starmer, la ha llamado a acudir a la Cámara de los Comunes el lunes por la tarde, pero la han encerrado en el número 10 de Downing Street, su residencia oficial. Se espera que se vaya antes del final de la semana.

La gran pregunta es quién la sucederá. Caen los nombres de Jeremy Hunt, Ben Wallace y Rishi Sunak, mientras que Boris Johnson también alberga la ambición de hacer un regreso espectacular.



ttn-es-23