A pesar del buen inicio de temporada y del aclamado partido de despedida de Claudio Pizarro, la bendición de la casa del Werder Bremen está torcida. Antecedentes: la destitución del veterano portavoz del estadio, Christian Stoll, quien ha realizado graves acusaciones contra el club.
Werder Bremen lanzó la bomba el miércoles por la tarde: en un breve mensaje, el club de la Bundesliga anunció la separación del locutor del estadio Christian “Stolli” Stoll “con efecto inmediato”.
Durante 21 años, Stoll había desempeñado anteriormente el papel de calentador en el Weser Stadium junto con Arnd Zeigler, también conocido en la televisión.
Después de varias discusiones en las últimas semanas, se tomó la decisión, según el comunicado. Zeigler inicialmente liderará el programa solo en los partidos en casa de Bremen. Stoll ya no estuvo al micrófono en el partido de despedida de Claudio Pizarro el sábado.
Mala conducta después de la “fase final altamente dramática”
El jugador de 62 años, que también ejerció como vocero en el estadio de la selección alemana entre 2006 y 2016, se pronunció poco después con un comunicado escrito que citan varios medios.
Stoll admitió una mala conducta tras el estrecho empate 1-0 contra el FC Augsburg en la sexta jornada. Después del final de la “fase final altamente dramática”, se dejó llevar por los comentarios al árbitro Martin Petersen y al gerente de FCA, Stefan Reuter.
“Le dije al árbitro que prefería pitar la liga de distrito, al miembro de la dirección del Augsburger que tenía un grupo de personas antipáticas al principio”, admitió Stoll, quien enfatizó: “Por supuesto que me disculpé con ambos caballeros mientras tanto”.
Graves acusaciones contra el Werder Bremen
No obstante, Werder le informó que su comportamiento no coincidía con los valores del club. El club rechazó una separación amistosa a finales de año y su deseo de acompañarlo en el próximo partido en casa ante el Gladbach.
“Hasta el pedido urgente de por lo menos pasar a despedirse de Claudio Pizarro fue rechazado”, dijo Stoll.
Él “también se disculpó con los responsables del club y sinceramente lamentó mi mal comportamiento. No busqué excusas y confesé mi error. Eso es todo lo que pude hacer. Sin embargo, fui perseguido de la finca de un momento a otro. .”
Stoll sospechó que los comentarios críticos en su papel como columnista de los medios de Bremen fueron la verdadera razón del fin del partido verde-blanco. La expulsión le ofendió “en mi orgullo de ser parte de la familia Werder y hirió mi honor personal como persona” y le duele “extremadamente”.