Microsoft es el primer inversionista estadounidense en Uber que se sabe que respaldó a CloudKitchens, la nueva empresa de «cocina oscura» dirigida por el controvertido cofundador de la compañía de transporte compartido, Travis Kalanick, según dos personas con conocimiento de la inversión.
La inversión fue parte de la ronda de financiación de $ 850 millones de CloudKitchens que se cerró en noviembre de 2021, una combinación de deuda y capital que valoró a la empresa con sede en Los Ángeles en $ 15 mil millones, dijeron las personas.
Desde que recibió el aumento de efectivo, CloudKitchens ha podido impulsar su crecimiento a nivel mundial, según informó el Financial Times el martes, con más de 4000 empleados en los EE. UU., América Latina, el Reino Unido y Medio Oriente.
CloudKitchens compra o alquila espacio de almacenamiento, convirtiendo las instalaciones en «cocinas oscuras», unidades que los negocios de restaurantes pueden alquilar para cocinar alimentos que se venderán a través de aplicaciones de entrega como DoorDash o Uber Eats.
Más recientemente, CloudKitchens también comenzó a utilizar el espacio sobrante en las instalaciones para almacenar productos de conveniencia, como alimentos para mascotas o medicamentos de venta libre.
La participación de Microsoft sigue a su inversión de alrededor de 100 millones de dólares en Uber en 2015, cuando el servicio de transporte compartido estaba valorado en alrededor de 50.000 millones de dólares. Pero la decisión de la compañía de software de apoyar nuevamente a Kalanick, cuya salida de Uber en 2017 fue provocada por una serie de escándalos éticos y fallas de gestión, parece diferenciar a Microsoft de los otros grandes inversores de Silicon Valley que respaldaron al empresario por última vez.
Cuatro ex empleados le dijeron al Financial Times que CloudKitchens sufría muchos de los problemas culturales que se encontraron en Uber y, como resultado, estaba experimentando una alta tasa de deserción del personal. Una antigua figura sénior, que también había trabajado anteriormente en Uber, describió CloudKitchens como «el lugar más tóxico que he visto o experimentado».
Otro ex empleado dijo: “Si quieren ser una empresa exitosa, debe haber un cambio cultural muy grande. Las personas necesitan ser valoradas como personas dentro de la empresa”. CloudKitchens se negó a comentar sobre su cultura.
La razón detrás del interés de Microsoft en CloudKitchens y el riesgo de asociarse con una figura tan controvertida como Kalanick no está clara.
La inversión de Microsoft podría ser parte de un acuerdo comercial que involucre su negocio de computación en la nube Azure, un acuerdo común en la industria. Varios operadores de cocinas oscuras usan la tecnología de Microsoft, incluido el monitoreo por video de la preparación de alimentos y los sensores de «internet de las cosas», según los materiales de marketing de la compañía de software, aunque CloudKitchens no se menciona entre ellos.
Microsoft y CloudKitchens se negaron a comentar sobre la inversión. Los detalles iniciales de la existencia de la ronda fueron reportado por primera vez por Business Insider.
Kalanick compró a los inversionistas existentes en City Storage Systems, lo renombró como CloudKitchens y asumió el cargo de director ejecutivo en 2018. A fines de 2019, vendió toda su participación en Uber, por un valor de más de $2500 millones, y dejó el directorio de la empresa. .
La ganancia inesperada del éxito de Uber permitió a Kalanick autofinanciar en gran medida su nuevo imperio de cocinas en sus primeros años. En 2019, atrajo $ 400 millones adicionales en fondos del fondo soberano de riqueza de Arabia Saudita, que también había sido inversor en Uber.
Sin embargo, ningún otro inversor importante de Uber ha revelado su participación en CloudKitchens. En 2017, varios de los mayores inversores de Uber, incluidas las firmas de capital de riesgo de Silicon Valley Benchmark, First Round Capital y Menlo Ventures, firmaron una carta exigiendo la destitución de Kalanick como director ejecutivo.
Después de su salida contundente de Uber, Kalanick ha luchado para mantener su última aventura fuera del foco de atención de los medios. A diferencia de la mayoría de las empresas emergentes, no ha anunciado grandes inversiones e incluso insta al personal a mantener a CloudKitchens fuera de sus perfiles de LinkedIn.
Además de Microsoft, el grupo de gestión de inversiones King Street Capital participó en la financiación de noviembre de CloudKitchens, dijeron dos personas con conocimiento de la ronda. King Street se negó a comentar. La ronda coincidió con la contratación del exejecutivo de Amazon, John Curran, como director financiero.