Las fuerzas rusas lanzaron misiles contra una base militar ucraniana cerca de la frontera con Polonia, en lo que pareció ser el ataque más occidental que han llevado a cabo en la guerra de 18 días.
Una declaración de la administración militar regional de Lviv dijo que las fuerzas rusas “lanzaron un ataque aéreo contra el Centro Internacional para el Mantenimiento de la Paz y la Seguridad”, que se encuentra en Yavoriv, en el oeste de Ucrania.
“Según datos preliminares, dispararon ocho misiles”, dijo la administración en un comunicado. Dijo que publicaría detalles adicionales sobre el ataque más adelante.
El bombardeo se produjo un día después de que el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Ryabkov, advirtiera que los convoyes de armas occidentales a Ucrania eran un «objetivo militar legítimo» para Rusia. Estados Unidos dijo el sábado que enviaría a Ucrania hasta 200 millones de dólares en armas pequeñas, antitanques y antiaéreas adicionales.
Con la guerra en su tercera semana, Rusia continúa sometiendo las ciudades ucranianas a intensos bombardeos, atrapando a miles de personas en refugios. Las condiciones son particularmente duras en la ciudad portuaria de Mariupol, que está completamente rodeada por tropas rusas y ha sido objeto de intensos bombardeos que han dejado sin electricidad y redes móviles.
“Hay informes de saqueos y enfrentamientos violentos entre civiles por los pocos suministros básicos que quedan en la ciudad”, dijo la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU. “Los medicamentos para enfermedades potencialmente mortales se están agotando rápidamente, los hospitales solo funcionan parcialmente y escasean los alimentos y el agua”.
En un video dirigido a los ucranianos el domingo por la mañana, el presidente Volodymyr Zelensky instó a la gente a seguir resistiendo. “Ucrania resistirá la prueba. Necesitamos tiempo y fuerza para romper la maquinaria militar que vino a nuestra tierra”, dijo.
“No subestimaré la amenaza. . . así que digo francamente: todavía tenemos que aguantar. Todavía tenemos que luchar. Todos los días y todas las noches debemos buscar formas de causar el máximo daño al enemigo”, dijo Zelensky.
La instalación objetivo del ataque del domingo es un campo de entrenamiento en el oeste de Ucrania, a 30 kilómetros al noroeste de Lviv, donde las tropas gubernamentales han realizado en los últimos años ejercicios conjuntos con fuerzas de Estados Unidos y otros países occidentales.
Los soldados ucranianos también están capacitados según los estándares de la OTAN en las instalaciones y se les ha enseñado a usar misiles antitanque, lanzadores y otros equipos militares entregados a Ucrania por los EE. UU.
El ataque se produjo dos días después de que cohetes rusos golpearan un aeródromo militar en Lutsk, en el oeste de Ucrania, en una señal de que el presidente Vladimir Putin estaba ampliando el alcance de su ataque.
Soldados ucranianos practican cómo usar misiles antitanque NLAW en enero antes del estallido de la guerra en el campo de entrenamiento militar de Yavoriv cerca de Lviv en el oeste de Ucrania. © AP
Las autoridades dijeron que Rusia también había bombardeado el aeropuerto de Ivano-Frankivsk, también en el oeste de Ucrania. Ruslan Martsinkiv, alcalde de la ciudad, confirmó el ataque en una publicación de Facebook.
“Según información preliminar, las explosiones de esta mañana se debieron a un impacto en el aeropuerto”, dijo Martsinkiv.
“Les recuerdo que el objetivo del enemigo es sembrar el pánico y el miedo. El enemigo puede y atacará en la retaguardia de Ucrania”, añadió.