Desde BZ/dpa
A partir del 2 de agosto, los asesores de inversión deben preguntar a los clientes sobre sus preferencias de sostenibilidad y ofrecer ofertas adecuadas. Pero, ¿cómo reconocen los inversores que la inversión es realmente sostenible?
Si desea invertir en inversiones sostenibles, debe cuestionar críticamente las promesas publicitarias de los proveedores. El centro de consumo NRW lo aconseja. Porque siempre hay quejas porque los proveedores solo se dan una mano verde.
El problema: Greenwashing es difícil de probar legalmente. Términos como sostenible, ético-ecológico o respetuoso con el clima no están protegidos: todos los proveedores pueden usarlos y cada inversor los entiende de manera diferente.
Qué consejos pueden tener en cuenta los inversores
En lugar de quedar encantados con bellas imágenes de prados verdes, diagramas o sellos, los inversores deberían concentrarse en hechos y cifras, aconseja Stiftung Warentest.
Por ejemplo, si un proveedor anuncia ahorros potenciales en el área de CO2, debe revelar la base para el cálculo. También es crucial si los objetivos de sostenibilidad están integrados en todo el modelo de negocio.
Conozca sus metas
Los inversores deben dejar claros sus objetivos personales, aconseja el centro de asesoramiento al consumidor de NRW. ¿Debería la inversión sostenible tener un efecto concreto y verificable, por ejemplo, menos emisiones de CO2? ¿O es suficiente si los proveedores se abstienen de invertir en carbón, energía nuclear o armas?
Los consumidores deben comparar ofertas y criterios cuidadosamente. Stiftung Warentest, por ejemplo, ofrece orientación en su comparación de fondos. Allí evalúa periódicamente las inversiones y sus criterios de sostenibilidad.