Según cálculos iniciales, hay 84 muertes en los tres primeros días, informan medios españoles. Las autoridades esperan un fuerte aumento en los próximos días. Más de 700 personas murieron durante la primera ola de calor en junio. Esa serie de días extremadamente calurosos llegó inusualmente temprano.
Los estudios demuestran que en España una media de 1.300 personas mueren cada año a causa del calor. Eso es notablemente menos que antes, en parte debido a las medidas nacionales después de la ola de calor mortal de 2003, cuando más de 6000 personas murieron en España en dos semanas. El aire acondicionado en los hogares de ancianos, por ejemplo, ahora es más común de lo que solía ser. También se enfatiza la importancia de beber suficiente agua para prevenir la deshidratación.
El calor también hace que el país sea más propenso a los incendios forestales. El viernes, 2300 personas fueron evacuadas por precaución en la Costa del Sol española debido a un incendio cerca de Málaga. Las llamas destruyeron alrededor de 1000 hectáreas de bosque en pocas horas. Las nubes de humo también llegaron a algunas playas, pero gracias a los fuertes vientos del interior, Málaga y localidades cercanas como Marbella, Fuengirola, Torremolinos y Benalmádena no corrían peligro.