Rcs Mediagroup, Blackstone y Kryalos Sgr formalizan a efectos de la disputa por las propiedades milanesas del grupo editorial vendidas en 2013 a Kryalos y cierran una disputa que llegó a la Cámara de Arbitraje de Milán y al Tribunal de Nueva York. Una nota lo anuncia.
El acuerdo alcanzado “implica una renuncia recíproca de todas las acciones y RCS se ha comprometido a pagar una contribución de 10 millones de euros a los gastos incurridos por Blackstone”. Además, el grupo editorial adquirirá, por un precio de 59,9 millones, el edificio de Via Solferino, sede histórica de la Corriere della Sera, parte del complejo inmobiliario Solferino-San Marco-Balzan objeto de la controversia.
“Aceptamos las decisiones del Tribunal Arbitral y del Tribunal de Apelación, que han determinado la corrección de las acciones de Kryalos y Blackstone y la ausencia de irregularidades o mala fe en relación con la transacción de 2013. En consecuencia, RCS reconoce que Blackstone o Kryalos no han llevado a cabo ninguna deslealtad y lamenta las molestias ocasionadas por la polémica”, es el comentario del presidente y director general de RCS, Urbano Cairo.
El Cairo: satisfecho con el acuerdo
“Nos complace haber llegado a un acuerdo de resolución con Kryalos y Blackstone sobre todas las disputas en curso y por la oportunidad de recomprar la sede histórica en Via Solferino”, continuó Cairo, agradeciendo al “Dr. Claudio Calabi (entre otras cosas, presidente de Risanamento y Santa Julia, educar) por su contribución a la consecución de este acuerdo».
Bottelli (Kryalos): actuamos en el mejor interés de nuestros accionistas
“Siempre hemos estado seguros de haber actuado profesionalmente y en el mejor interés de nuestros accionistas, y estamos satisfechos con la resolución positiva de esta disputa”, comentó Paolo Bottelli, director general de Kryalos.
Blackstone: agradecido con el panel arbitral de Milán
“Agradecemos a la Junta de Arbitraje de Milán y al Tribunal de Apelación de Milán por confirmar que Blackstone operó de manera totalmente correcta en relación con la compra de 2013. Nos complace que esta disputa ahora se resuelva en beneficio de nuestros inversores”, es El comentario de Blackstone de que había presentado una demanda de 500 millones en los Estados Unidos por daños y perjuicios.