La producción fue un 5 por ciento más alta que en 2020. Esto la vuelve a colocar en los niveles anteriores al coronavirus, porque en 2019 y los dos años anteriores, la producción estuvo invariablemente entre 2,5 y 2,6 millones de toneladas.
Casi dos tercios de la producción, más de 1,6 millones de toneladas o el 63 por ciento, son ladrillos para fachadas. El resto (937.000 toneladas) son ladrillos para paredes interiores.
El cuarenta y uno por ciento de la producción, o 1,05 millones de toneladas de ladrillos, se exporta. Esto sucede principalmente en los países vecinos. El Reino Unido es el mayor mercado de exportación de ladrillos de revestimiento, mientras que los Países Bajos son el país de exportación más importante de ladrillos para paredes interiores. Las importaciones de ladrillos cayeron un poco el año pasado a 187.277 toneladas. “Esto significa que las importaciones representan alrededor del 7,3 por ciento de la producción belga”, según la Federación de Ladrillos.