La parlamentaria Ellen Samyn se refiere a las declaraciones del presidente de Vooruit, Conner Rousseau, en el sitio web del partido. Se lee que la pensión mínima de 1.500 euros está casi alcanzada “gracias a las subidas del índice” y que el objetivo se alcanzará en 2023, un año antes de lo que había prometido cuando asumió en el Gobierno de Vivaldi.
Pero eso es pura decepción campesina. Los 1.500 euros de 2019 ahora apenas valen 1.335 euros netos para el poder adquisitivo de entonces, ya que el índice de precios al consumidor ha subido un 11 por ciento mientras tanto”, dijo Samyn.
Además, Vlaams Belang no quiere saber nada del principio de trabajar 45 años para conseguir la pensión mínima, ya que “prácticamente nadie lo consigue”. El partido pone el listón en el equivalente a 40 años de trabajo.