La Compañía de Fabricación de Semiconductores de Taiwán (TSMC) ha declarado que la idea de construir una fábrica en Europa ya no formaba parte de sus planes a corto plazo. Un anuncio que cae mal con las autoridades de la Unión Europea.
La Unión Europea tendrá que prescindir de TSMC
Hace seis meses, TSMC estaba en conversaciones con Alemania para establecer una fábrica allí. Mark Liu, presidente del fabricante taiwanés, quiso evaluar la posibilidad de establecer operaciones de fabricación en Alemania. A finales de 2021, el gigante taiwanés había declarado que esta decisión dependería de los subsidios del gobierno, la demanda de los clientes y el talento local. Hoy en día, las conversaciones probablemente estén estancadas.
El juego colaborativo Crayta, anunciado como un metaverso 2D, llegará a Facebook Gaming
La semana pasada, Taiwán y la Unión Europea mantuvieron conversaciones sobre una posible cooperación de chips. Mientras el Viejo Continente sufre cruelmente la escasez mundial de semiconductores, TSMC cambió de opinión y ciertamente no contribuirá al desarrollo de la industria en Europa. La Unión Europea realmente contaba con la contribución de TSMC.
En febrero de 2022, la Comisión dio a conocer un plan de 43 000 millones de euros para desarrollar la fabricación de semiconductores y mencionó a Taiwán como uno de los “socios de ideas afines con los que le gustaría trabajar”. El objetivo cuantificado de este proyecto es duplicar la cuota de mercado de la producción de semiconductores en Europa. Actualmente ronda el 10%, debería aumentar al 20% para 2030.
El gigante taiwanés apuesta por su desarrollo en Estados Unidos
TSMC es el fabricante de chips más grande del mundo. El gigante taiwanés tiene previsto establecerse en Estados Unidos. Seis fábricas podrían ver la luz en los próximos años. Una fábrica cerca de Phoenix, en la que ha invertido 12.000 millones de dólares y que debería empezar a operar en 2024. Arizona también debería albergar al menos cinco fábricas adicionales, dedicadas a la producción de semiconductores.
Con respecto a un posible establecimiento en Europa, Mark Liu dijo que, “esta es una zona del mundo donde tenemos relativamente menos clientes, pero aún estamos evaluando y aún no tenemos planes concretos”. otro fenómeno puede haber funcionado en contra de establecerse en Europa : según el jefe de Taiwan Semiconductor Manufacturing Company, los costos para el desarrollo de sus seis fábricas en los Estados Unidos son más altos de lo esperado. Él está señalando que “nos ocuparemos de este problema”.