Rusia está dispuesta a cooperar en la exportación “incondicional” de cereales de Ucrania. El Kremlin anunció esto el sábado luego de una conversación telefónica a tres bandas entre el presidente Vladimir Putin, su homólogo francés Emmanuel Macron y el canciller alemán Olaf Scholz. Por primera vez desde marzo, el trío realizó consultas de esta manera.
“Rusia está lista para ayudar a encontrar opciones para exportar granos sin trabas, incluido el grano ucraniano de los puertos del Mar Negro”, dijo el Kremlin en un comunicado.
Se informó desde el lado alemán que Putin estaría dispuesto a limpiar las minas para permitir el acceso de los barcos a los puertos de Ucrania. Eso no conduciría a acciones enemigas rusas. Las Naciones Unidas deben desempeñar un papel central en la consecución de un acuerdo y su aplicación.
La llamada telefónica duró ochenta minutos. Macron y Scholz instaron a Putin a negociar directamente con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky.
Putin advierte sobre una mayor desestabilización
También pidieron un alto el fuego inmediato y la retirada del ejército ruso del este y sur de Ucrania. También pidieron a Putin que libere a los 2.500 combatientes capturados durante la captura del complejo Azovstal en Mariupol.
Putin, a su vez, advirtió sobre una mayor “desestabilización” de la situación debido a los continuos suministros de armas occidentales a Ucrania.
Tanto Ucrania como Rusia tienen problemas con la exportación de, por ejemplo, granos debido a la guerra. Ucrania se considera un importante exportador de maíz y trigo, principalmente, pero la producción y las exportaciones se ven gravemente obstaculizadas por los combates.
Rusia también está teniendo dificultades para deshacerse de su grano y fertilizante. Esto se debe en gran parte a las sanciones occidentales. Los dos países producen un tercio del trigo del mundo, lo que genera problemas en el mercado mundial de alimentos.