A principios de este mes, se ordenó por decreto a las mujeres afganas que usaran burka en público, al igual que durante el primer régimen talibán entre 1996 y 2001. El llamado Ministerio para la Promoción de la Virtud y la Prevención del Pecado tenía canales de televisión afganos llamados para hacer cumplir el código de vestimenta a partir del sábado. Anteriormente, a las periodistas de televisión solo se les exigía llevar un velo.
Sin embargo, TOLOnews, Shamshad TV y 1TV transmitieron programas en vivo en los que los rostros de las presentadoras no estaban cubiertos. “Nuestras colegas femeninas están preocupadas de que si se cubren la cara ahora, el próximo paso será que les digan que dejen de trabajar”, dijo el editor en jefe de Shamshad TV, Abid Ehsas, a la agencia de noticias francesa AFP.
Un portavoz del ministerio advirtió el sábado que las mujeres corren el riesgo de ser despedidas si no cumplen con la orden. Además, los hombres también corren el riesgo de perder su trabajo si sus esposas o hijas se oponen al código de vestimenta.
Cada vez más restricciones
Después de tomar el poder en agosto, la organización extremista musulmana dijo que planea respetar los derechos de las mujeres en Afganistán. Sin embargo, en los últimos meses se ha anunciado la prohibición de la educación de las niñas. Las mujeres afganas también tienen prohibido aparecer en series de televisión desde noviembre y desde marzo solo pueden subir a un avión si van acompañadas de un familiar masculino. Se están reintroduciendo todo tipo de restricciones para las mujeres, especialmente a nivel local.