Diever recibirá veinte hogares flexibles. Al menos si le toca a la concejala de vivienda Renate Masselink (VVD). Junto con el resto del consejo municipal de Westerveld, propuso en diciembre al consejo municipal colocar las viviendas temporales en Dingspil, en el pueblo.
Las casas deberán permanecer en pie durante al menos quince años. El municipio determinará entonces si todavía son necesarios. “Vemos que hay mucha demanda de viviendas en Westerveld. Hemos estado trabajando en esto durante algún tiempo, pero construir casas nuevas a menudo lleva años. También nos gustaría hacer algo a corto plazo para las personas que han estado buscando una vivienda adecuada durante mucho tiempo, estas viviendas flexibles pueden ayudar a ello”, afirma Masselink.
El municipio espera que las casas formen juntas una “zona residencial normal”. De este modo, los residentes se convertirán en un “buen reflejo de la sociedad”. Según el alcalde y los concejales, esto significa que los inquilinos serán “principiantes, buscadores urgentes, titulares de estatus e inquilinos habituales”. La asociación de viviendas Actium debe hacerse cargo de este alquiler.
La vivienda flexible debería facilitar que Westerveld alcance sus propias ambiciones de construcción de viviendas. Cuando el consejo municipal tomó posesión de su cargo en 2022, se fijó el objetivo de añadir alrededor de mil viviendas al parque de viviendas de Westerveld hasta 2030. Estas veinte viviendas flexibles forman parte de una moción previamente adoptada por el ayuntamiento.
Antes de que el ayuntamiento tome una decisión definitiva sobre la llegada de la oferta de vivienda flexible, el lunes 2 de diciembre se celebrará una reunión sin cita previa con vecinos e interesados.