Según los datos facilitados por el Ministerio del Interior a través del sitio web Eligendo y disponibles en el sitio web de la Región de Liguria, a las 23 horas del 27 de octubre, la participación en las elecciones regionales fue del 34,68%. En cuanto a los datos de las provincias, en la ciudad metropolitana de Génova votó el 37,34%, en la provincia de Savona el 31,55%, en la provincia de La Spezia el 35,6%, en la provincia de Imperia el 27,15%. En 2020, al mismo tiempo, a nivel regional había votado el 39,8%, mientras que en la ciudad metropolitana de Génova había votado el 40,09%, en la provincia de Savona el 41,18%, en la provincia de La Spezia el 39,47%, en la provincia de Imperia 37,15%.
La decadencia de Imperia y el papel de Scajola
Llama la atención los datos de Imperia, la provincia con la participación más baja de la historia: 27,15%, 10 puntos menos que hace cuatro años y, en cualquier caso, siete puntos menos que la media regional del 34,68 por ciento. Por eso, algunos empiezan a sospechar que detrás de una participación tan baja puede estar la mano del poderoso alcalde Claudio Scajola, máximo exponente de Forza Italia y ex ministro del Interior.
La Spezia y Génova
Mantiene la participación tanto en Génova como en La Spezia. En la capital, la cifra del primer día de votación se detuvo en el 37,34%, por encima de la media regional y menos de 3 puntos por debajo de la ronda anterior, señal de que el alcalde Bucci logró hacer votar a sus conciudadanos. Incluso en La Spezia, el 35,6% está por encima de la media regional, aunque 4 puntos por debajo de 2020. También aquí Andrea Orlando de La Spezia, candidato a gobernador del centro izquierda, logró impulsar la participación.
Savona y los municipios inundados
Disminución de la participación en toda la provincia de Savona, en parte probablemente también debido a la inundación que afectó a Valbormida el sábado 26. El domingo 27 a las 23 horas habían votado el 31,55% de los con derecho a voto: casi un 10% menos que en 2020. descenso comparable al registrado en la provincia de Imperia y decididamente superior al ocurrido en Génova y La Spezia. La razón se debe en parte a la ola de mal tiempo que azotó el interior del país durante la noche del sábado al domingo. En las zonas no afectadas por el mal tiempo, de hecho, la caída se sitúa entre el 5 y el 8%: en la ciudad de Savona, votó el 35,5% de los electores (-7,7% respecto a hace cuatro años), en Albenga el 33,7% (-5 .%), en Varazze el 34% (-7,45%), en Alassio el 28,26% (8,5%). Colapso más marcado en los municipios inundados: en El Cairo Montenotte, el más afectado por la furia del mal tiempo (incluso el hospital quedó inundado), los electores, a las 23 horas de anoche, eran sólo el 21,37% de los con derecho a voto, el 41,16% de los votantes. Hace 4 años. En Carcare votó el 29,54% (-14,3%), en Altare el 20,03% (-17,7%). En Bormida, la participación se mantuvo estable en el 14,89%, en Dego en el 14,14% (prácticamente la mitad respecto a 2020), en Giusvalla en el 11,77%. Aparte de la bajísima cifra en los municipios inundados, no hubo problemas en las urnas. El único episodio se produjo en Savona, donde en el colegio electoral de la escuela Boselli Alberti la policía destituyó a un encuestador del instituto Piepoli, que trabajaba para la Rai. “Todos fueron muy corteses – explicó el encuestador a Secolo XIX – Me pidieron que no permaneciera en la sala de votación porque, entrevistando a los electores y diciéndoles que votaran nuevamente como lo habían hecho en las urnas, podía influir en los que no lo habían hecho. Aún no he votado. Luego me mudé a la planta baja, al atrio”.