«En este día, en presencia del Presidente Steinmeier, podemos afirmar, con las palabras pronunciadas por el Presidente Rau en 2002, que Marzabotto se ha convertido en un lugar que ya no separa a alemanes e italianos, sino que los une». Así lo afirmó el presidente de la República, Sergio Mattarella, en Marzabotto, en el 80º aniversario de la masacre nazi.
Mattarella: Marzabotto símbolo de la estrategia de aniquilación
«Casi ochocientas víctimas, asesinadas entre el 29 de septiembre y el 5 de octubre de 1944 en los municipios de Marzabotto, Monzuno y Grizzane Morandi. Casi doscientos niños. Marzabotto y Monte Sole se encuentran entre los símbolos más impactantes de la estrategia de aniquilación que acompañó el deseo de dominación, el mito racial, la opresión nacionalista, en resumen, esa mezcla ideológica que empujó al nazismo -y a sus cómplices, incluido el régimen fascista- a perseguir el proyecto catastrófico de conquistar Europa y vaciarla de su historia», recordó el Presidente de la República Sergio Mattarella.
«La memoria recuerda la responsabilidad en Marzabotto»
«Estamos aquí para inclinar la cabeza juntos ante tantas vidas cruelmente destrozadas, para llenar con los más intensos sentimientos de solidaridad esos abismos que la inhumana ferocidad nazi-fascista ha abierto en estas tierras, en estas comunidades. Estamos aquí para recordar, porque la memoria exige responsabilidad. En la Segunda Guerra Mundial se llegó al fondo del abismo. Barbarie y anulación de toda dignidad humana», añadió Mattarella.