El Reino Unido se suma a las protestas de la UE contra Google y está investigando al gigante americano de la alta tecnología bajo sospecha de “abuso de posición dominante” también en el mercado británico. El anuncio procede de la Cma, autoridad de competencia y mercado del Reino, que señala a la empresa en materia de publicidad online.
La acusación británica se produce mientras la Comisión Europea en la UE y el Departamento de Justicia de Estados Unidos están llevando a cabo investigaciones sobre Google, por razones similares. La CMA (Autoridad de Competencia y Mercados) ha establecido, a partir de las “conclusiones provisionales” de una primera fase de investigación, que la multinacional tecnológica californiana fundada por Larry Page y Sergey Brin es efectivamente responsable de “prácticas anticompetitivas”. en el mercado del Reino, en materia de publicidad. Prácticas que “pueden perjudicar a miles de editores y anunciantes de publicidad”, según consta en el dispositivo. Tienen que ver con las limitaciones que efectivamente obligan a “una gran mayoría de editores y anunciantes a utilizar Google… para poder vender y comprar espacios publicitarios en los sitios web”. Fuerzas atribuidas por la autoridad reguladora británica a la explotación “activa” por parte del gigante americano de la “posición dominante de sus servicios tecnológicos”. Al hacerlo, concluye la CMA, “Google impone una desventaja a sus competidores” y niega a los clientes los beneficios de “una mejor competencia para apoyar la promoción de su negocio”. Sin embargo, el dispositivo está sujeto a más investigaciones y a apelaciones y contraargumentos por parte de la empresa censurada.