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Sir Keir Starmer ha dicho que quiere impulsar los “intercambios” educativos y culturales entre el Reino Unido y la UE, y no descartó explícitamente negociar algún tipo de plan de movilidad juvenil con el bloque.
El primer ministro británico dijo el miércoles en una conferencia de prensa en Berlín que su “reinicio” de las relaciones con la UE implicaría una “relación más estrecha” con los estados miembros en la economía, la defensa y los intercambios.
Starmer dijo que “no tenemos planes” para un plan de movilidad juvenil entre el Reino Unido y la UE, pero no descartó las especulaciones de que podría negociar un acuerdo en el futuro.
Los funcionarios del gobierno británico dijeron que el Reino Unido quería impulsar los intercambios educativos y culturales, como los viajes escolares de niños y las giras de músicos, eliminando la burocracia.
Sin embargo, insistieron en que no alcanzaría la escala de movimiento o la duración de las estadías que normalmente se acuerdan para los programas de movilidad juvenil y que han sido planteados por algunas cifras en la UE.
La semana pasada, Downing Street dijo que Gran Bretaña “no estaba considerando” un plan de movilidad juvenil a nivel de la UE, frustrando a los activistas que presionaban por un retorno a las libertades previas al Brexit.
En abril, antes de las elecciones en el Reino Unido, el Partido Laborista emitió una fría respuesta a la oferta de la Comisión Europea de llegar a un acuerdo para permitir que los ciudadanos británicos de entre 18 y 30 años trabajen y estudien en el bloque durante hasta cuatro años.
Un funcionario laborista dijo en ese momento que el partido veía los planes de movilidad juvenil como “sinónimo de libertad de movimiento”, y señaló que Starmer había descartado categóricamente un retorno a la libre circulación.
El primer ministro del Reino Unido repitió el miércoles sus líneas rojas sobre el Brexit, incluyendo descartar el reingreso al mercado único o una unión aduanera.
Starmer estuvo en Berlín para conversar con el canciller alemán Olaf Scholz sobre un nuevo tratado bilateral entre el Reino Unido y Alemania que profundiza los lazos económicos y de defensa, y que ambas partes quieren finalizar a principios del próximo año.
La declaración conjunta acordada por Londres y Berlín esta semana para iniciar el proceso también mencionó “un aumento de los contactos interpersonales” entre los dos estados.
Mujtaba Rahman, director ejecutivo para Europa de la consultora de riesgo político Eurasia Group, dijo: “Starmer pareció dejar margen de maniobra en lo que respecta a la movilidad de los jóvenes. El lenguaje que utilizó sugiere que el Reino Unido podría querer reservarlo para la mesa de negociaciones; Gran Bretaña es muy consciente de que es una de las mayores exigencias de la UE”.
Sin embargo, predijo que cualquier iniciativa para iniciar conversaciones sobre esa propuesta se toparía con la resistencia de algunos ministros del gabinete. “El fantasma de la libre circulación sigue rondando a algunos en el alto mando del Partido Laborista”, dijo Rahman.
Sin embargo, algunos altos funcionarios laboristas, incluido el alcalde de Londres, Sadiq Khan, han acogido con satisfacción la idea de un plan de movilidad juvenil entre el Reino Unido y la UE.
El diputado conservador Kevin Hollinrake, secretario de Comercio en la sombra, acusó a Starmer de “conspirar para revertir el Brexit”.
El jueves Starmer se reunirá con el presidente francés, Emmanuel Macron, en el Palacio del Elíseo en París, después de asistir a la ceremonia de apertura de los Juegos Paralímpicos el miércoles por la noche.
Se espera que los dos líderes discutan sobre política exterior, incluidos los acontecimientos en Ucrania y el Medio Oriente, así como temas bilaterales como los lazos económicos y la cooperación para abordar la migración ilegal, según funcionarios del Reino Unido.