Kamala Harris se dispone a exponer sus argumentos ante los votantes estadounidenses

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Las historias que importan sobre el dinero y la política en la carrera por la Casa Blanca

Kamala Harris pronunciará el jueves en Chicago el discurso más importante de su vida, cuando acepte la nominación del Partido Demócrata para presidente y exponga sus argumentos para ser elegida ante decenas de millones de espectadores en todo Estados Unidos.

Los funcionarios de la campaña dicen que la vicepresidenta usará el discurso en horario estelar para compartir su historia personal y su visión política, marcando un contraste con Donald Trump mientras intenta convencer a los estadounidenses para que la elijan como la primera mujer presidenta del país.

Harris, una ex litigante, ha dicho que “procesaría el caso” contra Trump, el primer expresidente en ser condenado por un delito.

El discurso en la Convención Nacional Demócrata culminará unas semanas extraordinarias para Harris, quien reemplazó a Joe Biden como candidato demócrata después de que este pusiera fin a su intento de reelección y la apoyara a ella.

El exsenador estadounidense de 60 años ha cerrado la brecha en las encuestas entre Biden y Trump, y ahora está por delante del republicano a nivel nacional y en las encuestas de los estados clave que decidirán el resultado de la carrera en noviembre.

El dinero también ha llegado a la campaña de Harris en las últimas cuatro semanas, en medio de un estallido de entusiasmo demócrata por su candidatura en lo que se espera sea la carrera por la Casa Blanca más cara de la historia.

Esto marca un ascenso notable para la californiana, quien durante mucho tiempo estuvo plagada de preguntas sobre su perspicacia política luego de su fallida candidatura a la nominación demócrata en 2020.

A pesar del entusiasmo en Chicago, los líderes del partido, incluido el expresidente Barack Obama, han advertido a los demócratas que Harris aún enfrenta una “carrera reñida” contra Trump, cuyo apoyo al movimiento Maga solo se ha endurecido después del fallido intento de asesinato en su contra en julio.

Harris también debe abordar las tensiones que desde hace tiempo existen entre los demócratas por el apoyo de la administración Biden a la guerra de Israel en Gaza.

Una fuerte presencia policial en Chicago ha impedido que miles de manifestantes pro palestinos se acerquen al estadio o interrumpan los eventos, pero está previsto que la marcha más grande de la semana coincida con el discurso de aceptación de Harris el jueves.

Algunos demócratas también siguen molestos por la presión que recibieron contra Biden para que abandonara la contienda. El presidente defendió su legado en un discurso pronunciado el lunes, pero abandonó la conferencia inmediatamente después.

Harris, que no ha concedido ninguna entrevista desde que sustituyó a Biden en la fórmula, también está bajo presión para presentar propuestas más detalladas sobre todo, desde la economía hasta la inmigración y la política exterior, y mostrar en qué se diferencia de él.

La campaña de Harris ha centrado su discurso en un mensaje de “libertad” —incluidos los derechos reproductivos— y advertencias sobre el “extremismo” de extrema derecha de una posible segunda presidencia de Trump.

Estos temas se expusieron en la Convención Nacional Demócrata, con oradores en horario de máxima audiencia, entre ellos las ex primeras damas Michelle Obama y Hillary Clinton, y el ex presidente Bill Clinton. Celebridades como la estrella de televisión Oprah Winfrey y el músico Stevie Wonder también hablaron ante la multitud.

El jueves se especuló mucho sobre la posibilidad de que más celebridades hicieran apariciones sorpresa en la última noche de la convención, y muchos demócratas aplaudieron los rumores de que Beyoncé actuaría en apoyo de Harris. La canción de Beyoncé “Freedom” se ha convertido en un himno para la campaña de Harris y aparece con frecuencia en anuncios y en la campaña.

El discurso de aceptación de Harris será precedido por los discursos de la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, el senador de Arizona, Mark Kelly, y la esposa de Kelly, la ex congresista Gabby Giffords, quien sobrevivió a un intento de asesinato y una lesión cerebral traumática en 2011.