El fútbol suele ser un negocio difícil hoy en día. Pero las pequeñas acciones demuestran una y otra vez que las cosas pueden ser diferentes.
El equipo del club amateur sueco Kalmar AIK FK causó revuelo con una acción. Porque los jugadores y entrenadores se han afeitado la cabeza. La razón: su compañero Marcus Heman padece cáncer. Perdió todo su cabello debido a la quimioterapia. Por solidaridad, el equipo decidió hacer lo mismo.
En un vídeo del club se puede ver a los jugadores cogiendo el cortapelos y dando la bienvenida a Heman al vestuario. Cuando entra en la habitación, ve todos los pelos por el suelo y luego mira a sus jugadores, el futbolista enfermo de cáncer llora. Profundamente conmovido, abraza a sus compañeros.
El centrocampista Olle Björkegren demuestra entonces que ha ido un paso más allá. Tenía las letras «MHFC» tatuadas en su brazo izquierdo. El significado: Marcus Heman, que se joda el cáncer. Heman está profundamente conmovido por el apoyo a la lucha contra el cáncer. “¿Hablas en serio?”, pregunta el paciente con cáncer, asombrado, y toma a Björkegren en sus brazos.
Un gesto que demuestra que el fútbol moderno no siempre es cuestión de dinero.