El incidente ocurrió el 18 de julio cerca de Raversijdestraat, en el distrito de Mariakerke.
La jornada de socorrismo de la playa finalizó a las 18.30 horas, pero poco después dos menores volvieron al agua. Sin embargo, el niño de once años y su hermano de diecisiete se metieron en problemas. Algunos testigos sacaron a las víctimas del agua.
Mientras tanto, los testigos también avisaron a los servicios de emergencia, que llegaron rápidamente al lugar para administrar los primeros cuidados médicos. Una de las víctimas tuvo que ser reanimada pero murió ayer a causa de las heridas.