Maximilian Schachmann se ubicó entre los 10 primeros en la contrarreloj de los Juegos Olímpicos de verano en París con una valiente actuación en condiciones difíciles.
El berlinés de 30 años condujo bajo la lluvia por las traicioneramente resbaladizas calles del centro de París hasta conseguir un buen noveno puesto en la victoria favorita del belga Remco Evenepoel.
El campeón mundial de contrarreloj Evenepoel consiguió su primer oro olímpico tras 32,7 km y 36:12 minutos, casi 15 segundos por delante del italiano Filippo Ganna, que se había proclamado dos veces campeón del mundo antes que Evenepoel. El compatriota de Evenepoel, Wout van Aert, se llevó el bronce (+25 segundos).
Schachmann, que antes había elogiado el “gran recorrido” con salida y llegada en la Catedral de los Inválidos, fue el único alemán en la salida en la lucha contra el crono.
Con una buena fase final recuperó algunas posiciones, pero al final se quedó a 1:38 minutos de Evenepoel y a 1:13 de una medalla. Anteriormente, en la carrera femenina, Mieke Kröger había terminado 13.ª con la dominante victoria de la australiana Grace Brown, mientras que Antonia Niedermaier quedó 15.ª.
El último medallista alemán en la contrarreloj masculina fue Tony Martin, con la plata en Londres 2012, y Jan Ullrich también obtuvo el segundo puesto en Sydney 2000.
El campeón olímpico de Tokio, Primoz Roglic, falta en París. El esloveno, compañero de Schachmann en el Red Bull-Bora-hansgrohe, sufrió una fractura de vértebra en una caída durante el Tour de Francia, que finalizó el pasado domingo.
Su compatriota Tadej Pogacar canceló su salida olímpica con poca antelación, pero el ganador del Tour no estaba programado para participar en la contrarreloj de todos modos.