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Citigroup dijo que sus ganancias trimestrales aumentaron un 10 por ciento respecto del año pasado, incluso cuando el banco enfrentó mayores pérdidas en su negocio de tarjetas de crédito y una multa regulatoria de 136 millones de dólares.
El banco ganó 3.200 millones de dólares en el trimestre, una cifra mejor de lo esperado. Los ingresos aumentaron a más de 20.000 millones de dólares, frente a los 19.000 millones de dólares del año anterior.
El banco corporativo y de inversión de Citi fue el mayor impulsor de las ganancias por segundo trimestre consecutivo, después de un resurgimiento en las transacciones y ofertas de deuda.
La directora ejecutiva, Jane Fraser, ha renovado el liderazgo de la división bancaria y ha contratado al veterano de banca de inversión de JPMorgan, Vis Raghavan, para dirigir el negocio.
Tyler Dickson, ex director del banco de inversiones de Citi que estuvo en el grupo durante más de 30 años, anunció esta semana que se marcharía al gigante de capital privado Blackstone.
La división bancaria, que incluye préstamos corporativos y banca de inversión, generó ingresos de 1.600 millones de dólares en ganancias antes de impuestos, un 38 por ciento más que en el mismo período del año anterior.
“Nuestros resultados muestran el progreso que estamos logrando en la ejecución de nuestra estrategia y el beneficio de nuestro modelo de negocio diversificado”, afirmó Fraser.
Citi está en medio de una reestructuración anunciada en septiembre pasado. Ha prometido eliminar hasta 20.000 puestos de trabajo para 2026 para impulsar los rendimientos, que han quedado por debajo de los de sus rivales.
Nueve meses después de iniciar el programa, Citi ya ha reducido el número de empleados en 11.000, pero aún no se han materializado reducciones sustanciales de costos.
Los resultados de Citi incluyeron una multa de 136 millones de dólares por no cumplir con los términos de un acuerdo de 2020 con los reguladores bancarios estadounidenses para mejorar la gestión de datos y los controles de riesgo.
Las ganancias trimestrales del banco también se vieron afectadas por pérdidas vinculadas a los préstamos al consumo, ya que las tasas de interés más altas comenzaron a afectar a los hogares estadounidenses con problemas de liquidez.
Las ganancias de los negocios de tarjetas de crédito y banca de consumo de Citi en Estados Unidos cayeron un 74 por ciento respecto al año pasado.
Las pérdidas crediticias en esos negocios le costaron al banco 2.300 millones de dólares en el trimestre, frente a los 1.500 millones de dólares del año anterior, impulsadas en gran medida por un aumento en los prestatarios morosos de tarjetas de crédito.
El crecimiento interanual de los ingresos provenientes de tarjetas de crédito emitidas en nombre de minoristas como Costco o Home Depot también cayó al 6 por ciento, desde el 18 por ciento en el primer trimestre, en una señal de que el gasto del consumidor se está debilitando.