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Las autoridades chinas han abierto una investigación sobre los envíos de aceite de cocina después de que un informe de los medios locales afirmara que se habían utilizado camiones cisterna de combustible para transportar aceite comestible sin limpiar, lo que desencadenó el último escándalo de seguridad alimentaria en el país.
Un video encubierto publicado la semana pasada por el periódico estatal Beijing News mostró que numerosos camiones cisterna transportaban aceite de cocina, y un conductor dijo que era un «secreto a voces» en la industria que los camioneros no limpiaban sus tanques cuando cambiaban entre el transporte de líquidos tóxicos y comestibles.
“Transporte azúcar, miel, melaza, aceite de cocina, lubricante para motores”, dijo otro conductor en el video. “Transporte de todo”. Un tercer conductor de camión dijo que normalmente no pagaba los 400-500 RMB (55-69 dólares) para lavar el tanque de su camión antes de cambiar la carga.
El Consejo de Estado de China, el gabinete, anunció esta semana una investigación conjunta de múltiples agencias lideradas por la comisión de seguridad alimentaria para “examinar a fondo los problemas relacionados con el transporte de aceite de cocina en camiones cisterna” y “castigar severamente” a las empresas e individuos que infrinjan la ley, según los medios estatales.
El informe, que implicaba a la empresa estatal china de alimentos Sinograin, desencadenó una protesta pública, y los usuarios de las redes sociales y otros medios locales desenterraron acusaciones anteriores de petroleros contaminados. Utilizando datos de fuentes abiertas, una persona rastreó un petrolero sospechoso que realizaba entregas a una instalación de Yihai Kerry Arawana, una empresa líder en el mercado de aceite de cocina del país.
Sinograin dijo en un comunicado que había lanzado una “inspección especial exhaustiva” en todas sus operaciones y que incluiría en la lista negra a todas las empresas de transporte que violaran las regulaciones. Yihai Kerry dijo que tenía un sistema integral de seguridad alimentaria en funcionamiento y que una investigación interna determinó que todos los buques cisterna que abastecían a sus instalaciones “se sometieron a rigurosos procedimientos de verificación e inspección”.
La revelación de prácticas de transporte insalubres recuerda un escándalo de seguridad alimentaria anterior en 2011, cuando se descubrió que empresas e individuos recogían aceite de cocina de las alcantarillas de las calles para reciclarlo y revenderlo.
China ha sufrido durante mucho tiempo escándalos relacionados con la seguridad de los alimentos y los medicamentos, y los reguladores han hecho la vista gorda ante los recortes de costos de las empresas. En 2007, China ejecutó a su ex jefe de regulación de alimentos y medicamentos por aceptar sobornos para aprobar medicamentos que luego se descubrió que tenían problemas de calidad que se cree que provocaron la muerte de al menos cinco personas.
En 2008, la leche en polvo contaminada con melamina, una sustancia química tóxica, provocó la enfermedad de más de 300.000 bebés y al menos seis muertes.
En 2014, se descubrió que un proveedor de McDonald’s y KFC suministraba carne vencida a establecimientos de Shanghai, mientras que se reveló que los trabajadores de una franquicia de Subway en Beijing habían alterado las fechas de vencimiento de los productos alimenticios.
En 2018, un fabricante de vacunas fue multado con más de 1.300 millones de dólares por distribuir cientos de miles de dosis defectuosas a niños.
Las reiteradas deficiencias de seguridad han provocado una desconfianza generalizada hacia la leche en polvo y otros alimentos y medicamentos fabricados en el país, lo que ha llevado a muchos consumidores chinos a preferir productos importados más costosos, a pesar del énfasis del Presidente Xi Jinping en la importancia de la seguridad alimentaria para el país.
Las ventas de aceite de cocina importado aumentaron esta semana en las plataformas de comercio electrónico de China, mientras que las de las marcas Sinograin fueron eliminadas.
«Hemos vendido en pocos días lo que normalmente venderíamos en un mes», dijo un comerciante de aceite de cocina importado a los medios chinos.