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Los niveles de estrés están aumentando entre el personal del Banco Central Europeo, según una encuesta que encontró que casi el 40 por ciento de sus empleados están en riesgo de agotamiento y el 9 por ciento tiene pensamientos suicidas.
Los resultados de la encuesta, a los que ha tenido acceso el Financial Times, muestran que la ansiedad en el lugar de trabajo del BCE ha aumentado en los últimos años. Algunos empleados dicen que sufren agotamiento, mientras que otros sienten que les falta control, que reciben un trato injusto o que no reciben el apoyo adecuado.
Los resultados de la encuesta, que se llevó a cabo en abril y mayo a petición del comité de personal del BCE, elegido por los trabajadores del banco central, han llevado a los representantes sindicales a pedir que se tome más en serio el bienestar de los trabajadores.
Carlos Bowles, vicepresidente del sindicato Ipso que representa al personal del BCE, dijo: “Lo último que Europa necesita ahora es ver los procesos internos del BCE afectados por malos juicios o errores en el análisis de datos antes de que se tome una decisión crucial sobre las tasas de interés”.
Además de la intensa carga de trabajo, Bowles citó preocupaciones sobre el impacto del favoritismo y el “reclutamiento manipulado” en la salud mental del personal.
La proporción de empleados del BCE que, según los responsables del estudio, corren riesgo de sufrir agotamiento aumentó del 33,2% en la encuesta anterior de 2021 al 38,9% este año, y 146 empleados, o el 9,1% de los encuestados, afirmaron haber experimentado pensamientos suicidas, frente al 6,1% en 2021.
Más del 77 por ciento de los encuestados indicaron que sufrían al menos uno de los síntomas psicosomáticos mencionados en la encuesta, una lista que incluye agotamiento, cansancio, trastornos del estado de ánimo y desconexión.
El estudio, realizado por Psy@work, se basó en las respuestas de 1.602 miembros de la plantilla total del BCE, de 5.089 empleados.
El BCE afirmó que había puesto en marcha medidas “para responder a los problemas que se habían identificado previamente y que se prevén más medidas para abordar cuestiones como la carga de trabajo y las oportunidades profesionales”. Agregó que el personal tenía acceso a una línea de ayuda las 24 horas, consejeros sociales y asesoramiento médico.
“Nos tomamos muy en serio la salud y el bienestar de nuestro personal y seguiremos colaborando con el comité de personal y todos nuestros colegas sobre estos temas y sus causas fundamentales”, dijo un portavoz del BCE.
También está revisando sus procedimientos internos de información, investigación y disciplina, y realizando grupos de discusión en los que el personal puede hablar sobre el estrés en el trabajo y sugerir formas de mejorar sus condiciones de trabajo.
Los funcionarios sindicales ya se han enfrentado anteriormente con el BCE por cuestiones salariales y presentaron una queja oficial el año pasado después de que el personal recibiera un aumento salarial del 4 por ciento a principios de 2023, menos de la mitad de la tasa de inflación de la eurozona del año anterior.
Sin embargo, los niveles de estrés entre los empleados del BCE parecen similares a los del trabajador europeo medio. El 39% de los trabajadores con sede en la UE encuestados en 2021 por la Fundación Europea para la Mejora de las Condiciones de Vida y de Trabajo se quejaron de agotamiento físico o emocional.