Si hay un producto que apuesto a que has visto en tus redes sociales, pero que quizás te dé miedo probar en la vida real, son las gotas bronceadoras. Con más de 57 millones de publicaciones en TikTok y miles de millones de visualizaciones, las gotas bronceadoras o bronceadores líquidos han sido uno de los productos más destacados de los últimos años, con influencers y expertos en belleza demostrando cómo unas gotas pueden transformar tu piel y engañar a cualquiera haciéndoles pensar que has pasado unas horas en Saint Tropez, en lugar de veraneando en el Reino Unido (que actualmente implica paraguas, sudadera y la gran luz encendida).
Para muchos de nosotros, el protector solar facial se ha convertido en un elemento básico de nuestra rutina de cuidado de la piel y la idea de dejar que nuestra piel se exponga al sol no justifica el miedo a las arrugas o las manchas de la edad. Pero, si, como yo, esto no te impide desear ese bronceado de aspecto natural, entonces es hora de tomar nota.
Me he convertido en una fiel defensora y fan incondicional de las gotas bronceadoras durante el último año y ahora no puedo imaginarme maquillándome sin ellas. También suelo usar gotas bronceadoras en los días que no me maquillo cuando no quiero maquillarme por completo, pero también prefiero no asustarme frente al espejo.
Esto significa que he probado muchos productos y tipos diferentes según el acabado deseado y el tipo que quiero usar. Sigue leyendo para descubrir por qué uno de mis favoritos cuesta menos de 10 libras y por qué este producto falso puede hacerte cambiar tu favorito actual.