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Ghana ha llegado a un acuerdo que eliminará casi el 40 por ciento del valor de 13.000 millones de dólares en bonos internacionales, poniendo a la nación de África occidental en camino de poner fin a casi dos años de incumplimiento de su deuda.
Los tenedores de bonos, incluidos Abrdn, Neuberger Berman, Greylock Capital Management y Amundi, renunciarán a 4.700 millones de dólares de su reclamo original, dijeron el lunes en declaraciones el gobierno de Ghana y un comité que representa a los acreedores extranjeros.
El acuerdo es la última reestructuración de deuda soberana lanzada bajo un “marco común” aprobado por el G20 para llegar cojeando a la línea de meta, después de que el proceso estuvo plagado de retrasos.
Los tenedores de bonos también votaron finalmente para aprobar una reestructuración por parte de Zambia el mes pasado bajo el marco, casi cuatro años después de que la nación del sur de África incumpliera sus obligaciones.
El acuerdo de Ghana “implica importantes concesiones por parte de los tenedores de bonos, al tiempo que proporciona al gobierno el alivio de la deuda necesario”, dijo el gobierno. Se espera que cumpla con los objetivos de deuda establecidos por el FMI, añadió.
Ghana también ha estado en conversaciones con prestamistas oficiales que ahora se espera que evalúen si los términos ofrecidos a los tenedores de bonos privados coinciden con la escala de alivio que están negociando.
La mayoría de los bonos perderán el 37 por ciento de su valor nominal a medida que se reestructuren en deudas con vencimientos más largos que paguen un interés del 5 por ciento durante los próximos cuatro años. Hasta 1.600 millones de dólares de los nuevos bonos no estarán sujetos a una reducción en su valor nominal, pero tendrán tasas de interés más bajas del 1,5 por ciento.
El comité internacional de tenedores de bonos posee alrededor del 40 por ciento de la deuda, mientras que un comité regional de tenedores de bonos posee otro 15 por ciento.
El acuerdo, que según el gobierno podría consumarse en unas semanas, coloca a Ghana en camino de salir del default para cuando se celebren las elecciones de diciembre, en las que el presidente Nana Akufo-Addo dimitirá.
Ghana se quedó atrás en el pago de deudas externas de casi 30 mil millones de dólares a fines de 2022 después de que una inflación de dos dígitos y la agitación en las exportaciones clave del país de oro, cacao y petróleo devastaran la economía.
El país recibió un rescate de 3.000 millones de dólares del FMI que requirió conversaciones sobre alivio de la deuda con los acreedores, que el gobierno de Ghana optó por llevar a cabo a través del entonces nuevo proceso del G20.
Pero el marco común no ha logrado en gran medida agilizar las negociaciones de reestructuración de la deuda soberana, particularmente en países que han acumulado una gama mucho más amplia de acreedores que en crisis pasadas, lo que dificulta la coordinación.
Las conversaciones sobre los tenedores de bonos de Ghana también toparon con un obstáculo en abril, cuando el FMI consideró que un acuerdo inicial no cumpliría los objetivos de deuda.
En un reflejo de cómo las reestructuraciones recientes han tenido que sortear las tensiones entre acreedores, el acuerdo de Ghana también incluye una cláusula llamada del acreedor más favorecido que impedirá que el gobierno dé a otros prestamistas mejores condiciones que los tenedores de bonos.
A Ghana también se le exigirá “publicar cierta información sobre la deuda pública semestralmente” y se le prohibirá impugnar legalmente los bonos.
El comité internacional de tenedores de bonos dijo que estas cláusulas de deuda “son parte del paquete de medidas para normalizar las relaciones con los inversores tenedores de bonos y avanzar hacia la restauración del acceso de Ghana al mercado internacional”.