El presidente de la AIC, Umberto Calcagno, que junto con la Unión Europea demandó a la FIFA: «El nuevo Mundial de Clubes traerá más daños que beneficios, se pide a los niños que no se tomen vacaciones y jueguen sin entrenar, una locura»
Afectados por el gigantismo, los organismos que rigen el fútbol internacional han sido atacados. Ahora le toca el turno a la FIFA, demandada por los jugadores en un proceso que en cierto modo es trascendental. La AIC italiana se unió a la PFA inglesa y a la UNFP francesa en el recurso judicial coordinado por el sindicato Fifpro Europa y presentado ante el Tribunal de Comercio de Bruselas: los recurrentes cuestionan la decisión unilateral de la FIFA de establecer el calendario de partidos internacionales y, en particular, de crear el Mundial de Clubes 2025.