Jan Grootenhuis, un herrador de Den Nul, dejó que un hombre local trabajara en su jardín. Hasta que la policía encontró allí un laboratorio de drogas. “Está tratando de incriminarme”.
¿Tienes preguntas, sugerencias o ideas sobre nuestro periodismo? Envíe un correo electrónico a nuestro defensor del pueblo a [email protected]
- Invitado:
- Joost Ingen-Housz
- Editorial:
- Berit Kramer
- Voz y Edición:
- Jan Paul de Bondt
- Foto:
- Sake Elzinga
- Coordinación:
- Henk Ruigrok van der Werve