Antes del partido de la Eurocopa de fútbol entre Inglaterra y Serbia se produjeron disturbios entre los dos campamentos de aficionados en Gelsenkirchen. Un portavoz de la policía lo confirmó en respuesta a una solicitud del “SID”.
Aún deben aclararse los detalles exactos del incidente, pero la situación está “bajo control”.
Según la policía, siete aficionados serbios fueron detenidos. Un portavoz de la policía dijo a la agencia de noticias AFP que se había presentado una denuncia contra uno de estos seguidores por lesiones corporales graves. Los aficionados ingleses, sin embargo, no fueron arrestados.
Numerosos vídeos en las redes sociales muestran el enfrentamiento entre los aficionados ingleses y serbios. Numerosas sillas volaron por el aire y también se dijo que se rompieron ventanas.
Según The Guardian, un inglés y un policía sufrieron graves heridas en la cabeza.
El partido había sido clasificado de antemano por la UEFA como partido de alto riesgo. En el partido del domingo por la tarde (21:00 horas/ZDF y MagentaTV) la presencia policial será incluso mayor que en el derbi regional entre Schalke 04 y Borussia Dortmund.
Además, en el estadio sólo se vende cerveza con un contenido de alcohol del 2,5 por ciento.