Según los investigadores, el animal viajó por tres países. Viajaría desde su lugar de nacimiento en el estado alemán de Baja Sajonia hasta Francia, acabando en el Pirineo catalán. El lobo fue visto allí por última vez en febrero de 2023. El director del Centro de Genética de Animales Salvajes, Carsten Nowak, afirma que sin la colaboración de laboratorios de España y Francia no habría sido posible documentar la trayectoria.
“La mayor distancia registrada hasta la fecha recorrida por un lobo fue de 1.092 kilómetros, entre Noruega y Finlandia. Nuestro individuo añadió una distancia a pie de 100 kilómetros”, dice Nowak. Los lobos son conocidos por viajar largas distancias, lo cual es bueno. De esta manera, varias poblaciones de lobos entran en contacto entre sí y se puede evitar tanto el aislamiento genético como la endogamia, añade Nowak.