RETRATO. Estos cuatro niños se enfrentan cada día al terrorífico sonido de las bombas: “Sólo quiero jugar”

Huyeron de la invasión israelí de Gaza. Huyó de las bombas y los tanques. Ahora viven con sus hermanos y hermanas en una tienda de campaña para refugiados y hacen cola todos los días para recibir agua y comida. Sus padres temen el gran ataque israelí ya anunciado contra la última ciudad del sur de Gaza. Un ataque que podría llegar en cualquier momento. Estos son los hijos de Rafah. “Tenemos que ganar dinero. Pero sólo quiero jugar. Y quiero volver a casa”.