Con motivo de la visita del emir qatarí Tamim ben Hamad Al-Thani a Francia este martes, fue recibido en el Elíseo por el presidente de la República, Emmanuel Macron. Para la ocasión, Qatar se ha comprometido a invertir 10.000 millones de euros en la economía francesa hasta finales de la década.
Objetivo: impulsar el comercio bilateral entre Francia y Qatar
Por primera vez en quince años, un emir qatarí pisó suelo francés en el marco de una visita de Estado. Tamim bin Hamad Al-Thani y Emmanuel Macron hablaron sobre múltiples temas delicados antes de firmar varios acuerdos, incluido el plan de inversiones de Qatar en Francia. Como precisó el Elíseo en un comunicado de prensa, la dotación de 10 mil millones de euros se utilizará para apoyar “ empresas jóvenes innovadoras y fondos de inversión en Francia, así como aquellos estrechamente vinculados a la economía francesa, para el beneficio mutuo de ambos países “.
En los últimos años, el emirato de Oriente Medio ya ha invertido mucho en Francia, como lo demuestra el lugar destacado del fondo de inversión soberano del país en la capital, el Paris Saint-Germain. Además del deporte, las inversiones qataríes se han realizado en los sectores inmobiliario, financiero, de transporte y de lujo. A partir de ahora, el país quiere intervenir en otros sectores de la economía francesa como la energía, los semiconductores, la industria aeroespacial, la inteligencia artificial, la tecnología digital, la salud y la cultura.
Hoy, los primeros ministros de los dos países, Gabriel Attal y Mohammed Ben Abderrahmane Al Thani, presidirán un foro económico sobre oportunidades de inversión en estos sectores clave. Presentarán con más detalle el acuerdo que pretende aumentar los flujos de inversión entre los dos países de aquí a 2030. Como señal alentadora, Francia y Qatar anunciaron que su comercio bilateral había alcanzado los 6.400 millones de euros en el período 2022-2023.
La visita del Emir duró dos días. Tras su reunión de ayer con Emmanuel Macron, los dos líderes asistieron a una cena de estado con invitados entre los que se encontraban el futbolista Kylian Mbappé, el empresario Nasser Al-Khelaïfi y el ex presidente francés Nicolas Sarkozy. Este último había sido uno de los principales actores en el fortalecimiento de los vínculos entre Francia y Qatar a principios de la década anterior. También estuvieron presentes varios ejecutivos, como Bernard Arnault, director general de LVMH, Xavier Niel, presidente del consejo de administración de Iliad, así como altos funcionarios de Airbus y Qatar Airways.