La Federación Medioambiental de Flandes Occidental comprende las numerosas preocupaciones de los agricultores, pero cree que ahora se presta demasiada atención a un problema: la compra de tierras agrícolas y la persecución de las organizaciones ecologistas. “Seguimos creyendo en la consulta, pero con interlocutores que se comporten con dignidad y respeto. Pedimos a las autoridades municipales y provinciales que renuncien explícitamente a esta intimidación y que no ‘abandonen apresuradamente y bajo presión las actuales conversaciones y planes y retomen su amplio papel social’. “