Un portavoz militar de los hutíes dijo que la capital yemení, Saná, y otras zonas controladas por los rebeldes fueron atacados. En total, los hutíes informaron de 48 ataques aéreos. «Los últimos ataques no quedarán sin respuesta y castigo», afirmó el portavoz.
Los ataques aéreos conjuntos del sábado en Yemen siguieron a una serie de ataques estadounidenses contra objetivos vinculados a Irán en Irak y Siria. Esos ataques fueron en respuesta a un ataque con drones que mató a tres soldados estadounidenses en Jordania.
Esta es la tercera vez que Estados Unidos y el Reino Unido atacan conjuntamente a los hutíes. En una declaración conjunta, los países dijeron que habían alcanzado 36 objetivos en trece lugares. El comunicado dijo que los ataques fueron «proporcionados y necesarios».
Apuntaron a depósitos subterráneos de armas, sistemas de misiles, instalaciones de lanzamiento, instalaciones de radar y las defensas aéreas de los hutíes. Los Países Bajos prestaron apoyo, como en operaciones anteriores. Australia, Bahréin, Canadá, Dinamarca y Nueva Zelanda también apoyan los ataques.