Aunque el tiempo no invitaba a darse un chapuzón en el mar, muchos surfistas habían traído sus tablas de surf a la playa de Wenduine. En el club de surf Surfing Elephant se solidarizaron con las víctimas en todas las zonas de guerra visibles u olvidadas. Los simpatizantes también podrían utilizar una tabla de surf y un traje del club de surf de forma gratuita y así participar en la campaña. La remada por la paz es una novedad en Bélgica. En todo el mundo, un ritual de surf pacifista de este tipo ocurrió por primera vez en los EE. UU., cuando George Floyd murió en 2020 después de la violencia policial y las protestas masivas que siguieron bajo el movimiento #blacklivesmatter.