Hasta hace poco, Ucrania utilizaba el calendario juliano, al igual que Rusia. Eso cambió después del ataque ruso en febrero de 2022. El año pasado, la Navidad se celebró dos veces: los creyentes podían elegir si querían ceñirse al 7 de enero o cambiar al 25 de diciembre. El verano pasado, el presidente Volodymyr Zelensky firmó una ley que estipulaba que Ucrania cambiaría completamente al calendario gregoriano y celebraría la Navidad el 25 de diciembre.
“Todo lo relacionado con Rusia, y cualquier cosa que hiciera igual que Rusia, disgustaba a la gente”, dijo a Reuters Mykhailo Omelian, un sacerdote ortodoxo de Kiev.
Hasta 1917, la parte occidental de Ucrania formaba parte de Austria-Hungría. Este período está siendo revisado ahora. “Resulta que en el pasado los ucranianos celebraban la Navidad el 25 de diciembre, al igual que el resto de europeos”, dijo a Reuters la creyente religiosa Tetiana, de 25 años.
Navidad en circunstancias sombrías
Durante la época soviética, la Iglesia ucraniana estaba dominada por la Iglesia ortodoxa rusa en Moscú. Pero en los últimos años la Iglesia Ortodoxa Ucraniana se ha separado de Moscú. El cambio de fecha de Navidad encaja con esta evolución. “Solían imponernos el 7 de enero”, dijo a Reuters Bohdan, un soldado estacionado en el este de Ucrania.
Ucrania también se prepara para una Navidad en circunstancias sombrías. El ejército ucraniano enfrenta escasez de tropas y municiones, mientras que el apoyo crucial de Estados Unidos es incierto debido a la batalla entre demócratas y republicanos en el Congreso.
La guerra también se hace sentir en Navidad, señaló la BBC durante una visita a una fábrica de adornos navideños en Klavdiievo-Tarasove, cerca de Kiev. La fábrica ahora produce estatuas en miniatura de soldados, aviones de combate y un tractor ucraniano que tira de un tanque ruso. Para el árbol de Navidad.