Ivo V. (37), de Breda, debe pasar dos años en prisión porque el año pasado mató a gran velocidad a Ibrahim Sahalir (44), de Den Bosch, en la A59. Así lo decidió el martes el tribunal de Breda. A V. tampoco se le permite conducir un automóvil durante dos años y también se le impone una sentencia condicional de dos años en caso de que cometa otro delito.
El 4 de mayo de 2022, Ivo V. chocó contra la parte trasera del Smart de Ibrahim con su gran Nissan. V. había pisado a fondo el pedal del acelerador, según los datos del coche. Había bebido demasiado y poco antes de la colisión circulaba a 187 kilómetros por hora cerca de Terheijden, donde por la noche el límite de velocidad es 130. Ambos coches circulaban por el carril derecho y la diferencia de velocidad era tan grande que el Nissan de Ivo V. empujó al Smart de Ibrahim cientos de metros.
Al final, ambos coches terminaron en la barandilla de la izquierda. El Nissan había golpeado al Smart con tanta fuerza que la matrícula quedó impresa en el Smart. Ibrahim murió entre los escombros.
Los transeúntes se dieron cuenta inmediatamente de que Ivo V. había estado bebiendo. Según testigos, hablaba con dificultad y olía a alcohol. H. no supo nada más sobre el accidente en el tribunal, afirmó. Ya había consumido cuatro latas de cerveza en casa después del trabajo. Bebió otras cuatro cervezas con un amigo en una tienda de patatas fritas. Al final acabó en la A59, de camino a casa de su novia, con cuatro veces más alcohol en la sangre.
El fiscal consideró en la vista de hace dos semanas que Ivo V. había conducido con mucha negligencia y por ello exigió una pena de dos años de prisión. También exigió que a V. se le prohibiera conducir durante dos años y recibiera otros dos años de prisión condicional, que deberá cumplir si comete otro delito.
El tribunal impuso a V. la misma pena que exigía la justicia.