A pesar de las condiciones adversas, la industria textil y de la confección suiza pudo recuperarse el año pasado. Las exportaciones de prendas de vestir alcanzaron un valor total de 940 millones de francos suizos (917 millones de euros) en 2021 y, por lo tanto, estuvieron un 11,4 % por encima del nivel del año anterior, que estuvo marcado por los efectos de la pandemia de Covid 19, anunció el gremio de la industria Swiss Textiles. Martes. Gracias al fuerte crecimiento, el volumen de exportación del año anterior a la crisis de 2019 se superó ligeramente (+0,8 por ciento).
Según la asociación, el repunte tuvo un efecto positivo en el mercado laboral: “Tanto en la industria textil y de la confección como en el comercio mayorista textil, el número de desempleados cayó alrededor de un 35 por ciento en comparación con el cierre de 2020”, dice la balance anual actual.
También hay esperanza de una tendencia alcista sostenida: las perspectivas de las empresas de la industria para la próxima primavera son “sólidas”, explicó la asociación. “Las perspectivas de exportación han mejorado un poco, las expectativas sobre los precios de venta se están estabilizando y las de los pedidos se están normalizando”, dijo la organización. “La economía se está estabilizando gradualmente. Muchos países europeos ahora también han comenzado a relajar las medidas de Covid 19”.
La industria textil y de la confección logra recuperarse en “condiciones difíciles”
En consecuencia, la asociación hizo un balance positivo del año, pero también destacó los numerosos desafíos a los que se enfrentó la industria: “Para la industria textil y de la confección, el año fiscal 2021 se caracterizó por la recuperación de la crisis de Covid 19”, explicó Swiss. Textiles. “El proceso de recuperación se llevó a cabo en condiciones difíciles”.
En consecuencia, por un lado, las “continuas restricciones a la actividad de viajes y eventos” pesaron sobre el negocio. “Por otro lado, los retrasos y las fallas en las entregas, seguidos de los altos precios del transporte y de las materias primas, ejercen presión sobre los márgenes de las empresas textiles y de confección”, agregó el presidente de la asociación, Carl Illi, en un comunicado. “Los aumentos de costos claramente perceptibles para la producción textil se pueden ver en todo el mundo, sin excepción. Además de las materias primas, se ven afectados los productos químicos y la energía”.
La asociación apuesta por la facilitación de exportaciones
A mediano plazo, Swiss Textiles se basa en condiciones marco legales más favorables para las exportaciones: “La implementación de las reglas de origen paneuromediterráneas revisadas (reglas de origen PEM) y la reducción de los aranceles industriales, que entrarán en vigor el 1 de enero de 2024, será tuyo en los próximos años haz un impacto”, dijo la asociación.
Peter Flückiger, director ejecutivo de Swiss Textiles, advirtió sobre el “riesgo de que estos efectos positivos se vean torpedeados por la relación actualmente destrozada entre Suiza y la UE”. Por lo tanto, la organización de la industria hizo un llamado a “la política y la administración federal para que hagan todo lo posible para detener la erosión de los acuerdos bilaterales y, más aún, para abrir aún más el acceso mutuo”.