Este sábado cerrará sus puertas el Albert Heijn en Laarderweg de Bussum. El supermercado era popular en el barrio. “No es una oferta muy amplia, pero es ideal para hacer un recado rápido”, dicen los vecinos que echarán de menos la tienda.
“Es realmente inútil que la tienda cierre”, dice la señora Westerbrink, residente local. “Afortunadamente todavía puedo caminar bien, pero esto será un problema importante para muchas personas mayores de la zona. Hasta donde puedo recordar, primero se ubicó aquí Simon de Wit y luego Albert Heijn. Está aquí desde hace cincuenta años. Debo confesar sinceramente que en los últimos años la tienda se ha deteriorado y ya no parece tan fresca”, continúa Westerbrink.
Sin embargo, las reacciones de los residentes locales son encontradas. “Para mí no es el fin del mundo. Hoy en día hay tantos supermercados en la zona que, para mí, podría convertirse en un parque infantil”, dice el vecino Thierry.
Maryam está especialmente preocupada por los ancianos. “Para mí la oferta era algo limitada, pero el cierre es menos favorable para las personas mayores de la zona, porque a menudo tienen menos movilidad”, señala.