Este jueves 29 de febrero el Ministerio de Economía anunció la firma de un acuerdo internacional que establece principios comunes para el desarrollo del 6G. Entre los firmantes se encuentran Australia, Canadá, Estados Unidos, Finlandia, Japón, Corea del Sur, República Checa, Reino Unido y Suecia.
Estos diez Estados se han comprometido a “ adoptar políticas y marcos para una conectividad abierta, gratuita, global, interoperable, confiable, resiliente y segura para redes futuras para un futuro más inclusivo, sostenible, seguro y pacífico », indica el comunicado.
La declaración conjunta se basa en varios principios para que estas redes sirvan a la seguridad nacional respetando la protección de la privacidad. Para ello, se desarrollarán normas para “ manera inclusiva e internacional en conjunto con los fabricantes “.
“ Francia se está posicionando a la vanguardia para anticipar y apoyar las nuevas redes y, en particular, el 6G, esencial para nuestros nuevos usos, como la IA. Estaré atento para garantizar que este desarrollo se lleve a cabo de acuerdo con nuestras normas actuales de respeto a la privacidad, el medio ambiente y los estándares de seguridad. », apoya la secretaria de Estado de Asuntos Digitales, Marina Ferrari, en el comunicado de prensa.
Debido a su apertura e interoperabilidad, estas futuras redes 6G deben permitir la conectividad global, incluso en los países en desarrollo. Para lograr esta ambición, se debe establecer un marco internacional de estandarización 6G.
Las redes 6G responderán a los desafíos ligados a la evolución de los usos digitales, como la inteligencia artificial, que requiere un procesamiento de datos cada vez mayor, una tecnología en la que Francia desea ser líder europea. También permitirán desarrollar aplicaciones en industria o salud que requieran reducir al máximo los tiempos de latencia.
Retos que Francia asumió en 2018 con el lanzamiento del Contrato Estratégico para sector de infraestructura digital. En 2023 se dio un paso más al incluir el Programa “redes del futuro” en las prioridades del plan Francia 2030 y dotándolo de un presupuesto de 65 millones de euros.