Un incendio en la chimenea del Ariane en Heeze, anoche, parecía un trabajo sencillo, pero se ha convertido en una actividad extenuante y que requiere mucho tiempo. Al llegar salía mucho humo por la chimenea.
Los bomberos querían deshollinar la chimenea con un ramoneur y así extinguir el fuego. Tal ramoneur consta de una serie de piezas de cadena de acero, con piezas de ángulo de hierro en el extremo para quitar el hollín y los residuos de carbón. La limpieza terminó tomando casi dos horas.
A pesar de haber sido barrido una semana antes, el conducto de la chimenea estaba muy afectado. El conducto deberá inspeccionarse adecuadamente antes de que la chimenea pueda usarse nuevamente. Para extinguir el fuego, el cuerpo de bomberos de Heeze recibió ayuda de colegas de Eindhoven.